El cepillado dental es el método de higiene que nos permite remover de forma más completa la placa bacteriana de la superficie de los dientes y encías. Después de comer es de vital importancia el cepillado dental y es que es habitual que restos de alimentos queden atrapados entre tus dientes.
¿Qué es el cepillo dental?
El cepillo dental es el instrumento más eficaz para eliminación de la placa bacteriana. Debe reunir unas características de tamaño, de diseño, calidad de los materiales y normas específicas de fabricación. Estas pueden variar en función de tus necesidades, ya que sus características exigirán un cepillo concreto.
El cepillo dental es el instrumento más eficaz para eliminación de la placa bacteriana. Debe reunir unas características de tamaño, de diseño, calidad de los materiales y normas específicas de fabricación. Estas pueden variar en función de tus necesidades, ya que sus características exigirán un cepillo concreto.
En la modificación de la Técnica de Bass, el cepillo realiza movimientos de rotación en el surco gingival. Esta técnica consiste en colocar el cepillo dental en un ángulo de 45° con respecto los dientes, presionando contra el surco gingival, es decir, la zona de unión entre la encía y el diente.
La Técnica de Bass modificada es la recomendada por Propdental por ser la más eficiente para remover la placa bacteriana.
Las cerdas se colocan en el margen gingival, se establece un ángulo de 45 grados con el eje de los dientes y se realiza un movimiento vibratorio anteroposterior.
Los movimientos de cepillado dental con la Técnica de Bass modificada se repiten alrededor de 20 veces y de 3 en 3 dientes a la vez.
En la cara lingual del anterior, el cepillo se inserta verticalmente y se presiona en el surco gingival en un ángulo de 45 grados. Después se limpia la superficie oclusal de los dientes presionando firmemente las cerdas contra la fosas y fisuras. Por último, se realiza el cepillado de la lengua para ayudar a eliminar las bacterias.
¿Cómo usar la seda dental?
Sujete la seda con firmeza entre los pulgares e índices. Pase la seda entre los dientes con movimientos suaves. No meta nunca el hilo dental con brusquedad en las encías. Cuando el hilo dental alcance la línea de las encías, dóblela formando una C contra un diente.
